Ambulancias aéreas han atendido 164 emergencias en primeros nueve meses del año

Mayoría de viajes del Servicio de Vigilancia Área de Seguridad Publica parten de Liberia, Golfito y Quepos

22/10/16 | 13:15pm

A la 1:18 p.m del 26 de julio, un helicóptero del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) despegó desde Isla Venado de Jicaral en la Península de Nicoya y se dirigió al aeropuerto internacional Juan Santamaría.

La aeronave matrícula MSP 008 transportaba a un menor de un año que minutos atrás había perdido su brazo izquierdo por un accidente de tránsito en la motocicleta que conducía su padre.

El recorrido fue uno de los 164 viajes de aerotransporte médico realizados por el SVA del Ministerio de Seguridad Pública en los primeros nueve meses del 2016, según datos proporcionados por la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).

La información no toma en cuenta los servicios privados de transporte que realizan empresas como Aerodiva, que viajó en dos ocasiones desde el hospital de San Carlos hacia el México y el aeropuerto Tobías Bolaños el pasado jueves para transportar a víctimas de la tragedia que cobró la vida de 12 personas en Cinchona de Alajuela.

Ese día, la coincidencia de la realización de un simulacro en el México sobre aerotransporte médico de emergencias permitió el uso de tres helicópteros de otra compañía: Air Evac Internacional.

La oficina de Prensa de la CCSS respondió que "la contratación de empresas privadas para traslados aéreos, es realizada por los establecimientos de salud de manera desconcentrada, acorde a las condiciones presupuestarias de cada unidad".

Origen Puntarenas

Este caso es uno de los 71 viajes que partieron desde la provincia de Puntarenas: la mayoría de ellos desde los hospitales de Quepos (28 viajes), Golfito (20) y de Ciudad Neilly (13). El resto lo completan el centro médico de San Vito y Tomas Casas Casajús de Ciudad Cortés, con tres viajes cada uno y las áreas de salud de Garabito, Golfito, Jicaral y Parrita, con cuatro viajes.

El hospital que más utiliza el servicio es el Enrique Baltodano Briceño de Liberia. De allí han partido 47 de los viajes realizados entre enero y setiembre del 2016.

Gracias al convenio entre el MSP y la CCSS, se han realizado 138 viajes en avioneta y 26 traslados en helicóptero al 30 de setiembre.

En la mayoría de los casos, los pacientes se trasladan de zonas rurales hacia el área metropolitana, especialmente a los centros médicos especializados como el de Niños (51 viajes), el México (49) y el San Juan de Dios (29). Otros viajes se realizan entre zonas rurales, por ejemplo, a la Clínica de Hone Creek llegaron 10 viajes en helicóptero procedentes de los territorios indígenas Talamanca Bribri y Talamanca Cabecar.

El motivo de los viajes está asociado en al menos 31 viajes con afecciones relacionadas con embarazos. También se incluyen traumas debido accidentes viales, y problemas respiratorios, infartos o quemaduras, entre otros.

El proceso

"Cada vez que algún médico de un establecimiento de salud requiere efectuar el traslado aéreo de un paciente, acude al nivel central para que le coordinemos con Vigilancia Aérea dicho traslado. En los casos en que no hay aeronave disponible, nuestros operadores informan de inmediato al establecimiento de salud la situación, a fin de que para que se proceda con el plan de contingencia respectivo", respondió vía correo electrónico la institución. La CCSS no informó en cuales casos la ausencia de una aeronave ha obligado a buscar un Plan B ni cual es el "plan de contingencia" respectivo.

¿Cómo se elige el medio de transporte? "Se define en función de diferentes variables" como el requerimiento del médico en cuanto a espacio y estabilidad, las condiciones del lugar de aterrizaje y el estado del tiempo, entre otros.

En promedio, cada uno de los 164 viajes el ha costado a la CCSS ¢172.340, pagados al MSP por el consumo del combustible de la aeronave.

En años anteriores el monto se cancelaba en dólares y se cobraba "por hora de vuelo", afirma la entidad.

En el 2015, por ejemplo, se invirtió en promedio, ¢189.823 por cada uno de los 266 viajes efectuados, según el tipo de cambio de diciembre de ese año.

¿Debe o no la CCSS tener sus propios medios de transporte aéreo, en caso que las empresas privadas o el servicio de vigilancia aérea no esté disponible?, preguntaron algunas personas tras la emergencia del pasado jueves en Cinchona.

"El tema ha sido sometido a valoración por parte de la institución, sin embargo no se ha logrado determinar su viabilidad en términos operativos, financieros y técnicos", respondió la institución.

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