Estudio de manto acuífero definirá si vecinos de pueblo en Sámara deben desalojar la comunidad

Un estudio hidrológico del manto acuífero sobre el cual se encuentra la comunidad de Matapalo de Sámara, en Nicoya, determinará la situación territorial de estos vecinos, es decir, si podrán quedarse en su comunidad o deberán salir.

El director de Planificación de Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (SENARA), Juan Carlos Mora, explicó en el programa Nuestra Voz que los vecinos deben esperar los resultados del estudio hidrológico, con base el cual se va a determinar las acciones a tomar con respecto a las edificaciones y actividades que se pueden realizar en esos terrenos.

Los vecinos de este poblado guanacasteco están muy preocupados porque temen verse obligados a dejar sus casas y negocios por la existencia del manto acuífero del río Malanoche.

Desde finales del 2016, el SENARE está realizando el estudio para determinar el mapa hidrogeológico de Sámara. Mora anunció que estará listo para junio de este año, el cual tiene un costo de ¢103 millones y ha implicado realizar 7 perforaciones.

“El hecho de que haya un manto acuífero no significa que no se pueda construir nada o no se puedan hacer actividades, pero se debe saber qué tipo de manto acuífero es y cuáles son sus zonas de recarga para darle”, explicó el funcionario.

71 familias habitan esta pequeña comunidad frente a la playa que forma parte de la zona marítimo terrestre, considerada por la Ley 6.043 un bien del Estado. A pesar de ello, durante tres décadas los habitantes han logrado vivir en esa zona gracias a las renovaciones de la concesión de los terrenos donde habitan, pero esta renovación se negó cuando el SENARA determinó que la comunidad se encuentra sobre un manto acuífero.

El dirigente comunal, Gerardo Arias, dijo que esta situación ha sido sin calvario para los habitantes de Sámara porque no tienen seguridad de que van a poder seguir viviendo en esos terrenos y realizando sus actividades normales, como la pesca y el turismo.

Arias denunció que en esos terrenos existen proyectos hoteleros millonarios a los que no se les ha negado la concesión. Por otro lado, el funcionario del SENARE dijo que no se están dando concesiones hasta que el estudio esté terminado.

“Si aquí se llegará a aplicar la Ley que se llegue a hacer en igualdad de condiciones y no solo para nosotros los pobladores samareños”, expresó el dirigente comunal.

El resultado del análisis hidrológico dará paso a un ordenamiento territorial para que la Municipalidad de Nicoya, los hoteleros y los habitantes pueden tomar desiciones con base en información científica, bajo el principio de que hay que proteger el agua.

“Decir que se va a mover a alguien es especular, lo que queremos es aportar información científica para que se conozca el estado de ese acuífero. Eso no significa que no se pueda vivir ahí o que no se puede construir ahí, lo que va a determinar es cómo va a crecer ese cantón a futuro”, finalizó Mora.