Informe señala falta de acción pública para ordenar el territorio
Alejandra Fernández Morera
17/11/15 | 08:58am
Un mercado inmobiliario operando con escasa restricciones gracias a un Estado permisivo, es la principal razón de que entre 1982 y 2013, el área construida en la Gran Área Metropolitana (GAM) prácticamente se duplicara.
Así lo revela el vigésimo primer informe Estado de la Nación dado a conocer este martes, el cual señala que la extensión de hectáreas con edificaciones pasó de 16.286 a 31.473 en ese lapso.
El "dejar hacer" en la GAM -donde se concentra más de la mitad de la población nacional- se combinó además con el crecimiento demográfico y económico del país y con la construcción de viviendas sociales, explicó el investigador del Estado de la Nación, Leonardo Merino.
"Allí donde el Estado no opera, lo hace el mercado, y no necesariamente para mejorar el desarrollo humano", sentencia el informe que califica de insostenible y excluyente la expansión urbana en esta región compuesta por 31 de los 81 cantones del país.
Y es que de la mano de la expansión de la vivienda urbana se han reproducido desigualdades sociales y patrones de segregación acorde con los ingresos de los habitantes de la GAM.
Así, los grupos de mayor poder adquisitivo se concentran en Santa Ana, Escazú, San José Centro, Heredia y Curridabat, mientras que Desamparados y Alajuelita se consolidan como lugares de residencia para hogares de ingresos medio bajos y bajos, concluye el Estado de la Nación.
Sólo en los últimos 12 años se ha venido agregando un promedio anual de 1,8 millones de m2 de nuevas edificaciones, dice el informe, ritmo que solo mermó durante la crisis económica de 2008-2009. La mayor parte -66,6 por ciento- de esa expansión metropolitana corresponde a construcción residencial.
Más de una cuarta parte de la superficie urbanizada (27,0 por ciento) -especialmente en cantones de Heredia y en La Unión- está incluso fuera de la línea que delimita la “zona de crecimiento urbano” establecida en el Plan GAM 1982, conocida como "anillo de contención".
La evidente falta de ordenamiento territorial que ha acompañado este crecimiento urbano tiene un impacto con altos costos ambientales, sociales y económicos.
Se estima que el congestionamiento vial en la GAM ocasiona pérdidas de tiempo equivalentes a $590 millones anuales (2 por ciento del PIB).
Aunque a inicios de los años ochenta el "Plan regional de desarrollo urbano de la Gran Área Metropolitana”, conocido como Plan GAM 1982, impuso regulaciones y límites al crecimiento, en la práctica el desarrollo urbano obvió la normativa generada. Treinta años después, el Plan GAM 2013- 2030 se encuentra impugnado ante la Sala Constitucional.
Para Merino, investigador del Estado de La Nación, es urgente que el país comprenda la importancia del ordenamiento territorial en el desarrollo humano. Además, que en el caso de la GAM, se trascienda la mentalidad cantonal para pasar a planificar regionalmente, es decir, en una suerte de alianza entre los 31 cantones.
Noticias, reportajes videos,
investigación, infografías.
Periodismo independiente en Costa Rica.
(506)4032-7931
|
comunicados@ameliarueda.com
Privacidad