Las misiones que se encontraban en Nicaragua de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) fueron expulsadas este miércoles de dicho país por el gobierno de Daniel Ortega.
Los grupos llamados Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (Meseni) y el Internacional de Expertos Independientes (GIEI), se encontraban en en este país centroamericano luego de un acuerdo firmado el 24 de junio de este año. Su tarea era monitorear en terreno la situación de los derechos humanos tras las protestas que iniciaron el 18 de abril.
La expulsión también conlleva la suspensión de cualquier visita por parte de algún miembro de este organismo a Nicaragua.
"La CIDH lamenta la decisión del Estado de Nicaragua y comunica que la Meseni seguirá funcionando desde su sede en Washington", afirmó el comunicado de la Corte.
Por su parte, la Cancillería de Nicaragua afirmó que la expulsión se da por “injerencistas”.
El trabajo
La Meseni presentó a mediados de año un amplio informe en el que documentaba minuciosamente las violaciones a los derechos humanos y en el que alertaba sobre posibles ejecuciones extrajudiciales tras el uso de francotiradores durante la represión de las manifestaciones.
En su informe aseguró que escuchó "centenares" de testimonios y reunió información documental y audiovisual. Según esos testimonios la represión "estuvo a cargo de la Policía Nacional, sus fuerzas antimotines y grupos parapoliciales, que actuarían con el apoyo de agentes estatales".
Desde junio el Meseni ha seguido recabando denuncias de ciudadanos nicaragüenses. Este miércoles publicó un nuevo informe en el que alertaba del "agravamiento de la represión" y el cierre de espacios democráticos en Nicaragua.
Además el GIEI, que analizó los crímenes cometidos desde el 18 de abril al 30 de mayo, dará su informe en los próximos días.