Mamá de Allison: No voy a estar tranquila hasta tener algo de mi hija que me diga que ya no está acá

Yendry Vásquez Cordero, la madre de la joven Allison Bonilla Vásquez, asesinada por un vecino, quien se deshizo de su cuerpo al arrojarlo en un botadero clandestino en Cachí de Paraíso, asegura que no estará tranquila hasta encontrar algo que le confirme que la muerte de su hija.

"No voy a estar tranquila hasta no tener algo de mi hija que me diga que ella ya no está acá", dijo Vásquez Cordero en una entrevista telefónica con AmeliaRueda.com, en la que pidió que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) mantuviera activa la búsqueda de los restos de Bonilla Vásquez hasta dar con su paradero.

La Policía Judicial suspendió la tarde del 5 de setiembre las operaciones para darse "un respiro" y replantear la forma en que se procedería con las labores de localización del cadáver, en un precipicio de más de 300 metros de profundidad, al que en apariencia fue lanzado por un hombre de apellidos Sánchez Ureña.

Vásquez Cordero dijo que la Delegación Regional del Organismo en Cartago le indicó que, una vez tengan definida la nueva estrategia, se la comunicarían; lo que hasta el momento de la redacción de este artículo no había sucedido.

"En el caso de Allison ellos (los agentes) la verdad han estado... como dicen ellos, se casaron con el caso de Allison. Ellos la verdad han estado muy pendientes. Hemos tenido mucha ayuda de parte de ellos", destacó la madre de la víctima sobre las diligencias.

Doña Yendry agradeció los mensajes y las oraciones recibidas, así como los arreglos florales y cartas que recibió en su casa el 5 de setiembre.

"Que me sigan apoyando porque en ese lugar no se encontró nada. Que me sigan apoyando hasta saber o encontrar algo de Allison", pidió Vásquez Cordero.

También, la madre de la víctima pidió justicia por Bonilla Vásquez, así como todos los crímenes que sufren las mujeres, al tiempo que solicitó un endurecimiento de los castigos para violadores y asesinos.

"Que se haga justicia, no solo por el caso mío, sino por el de muchas mamás que están pasando por situaciones como la mía. Creo que estas personas se merecen toda la vida en la cárcel, la verdad", aseveró Vásquez Cordero.

La búsqueda del cuerpo de Bonilla Vásquez arrancó el 3 de setiembre, luego de que el sospechoso -capturado un día antes por la Policía Judicial- confesara a la Fiscalía Adjunta contra el Narcotráfico y Delitos Conexos haber interceptado, abusado y matado a la joven, de 18 años, quien fue vista por última vez el 4 de marzo, cuando caminaba de la parada de buses a su casa en Ujarrás de Paraíso.

En la operación participa una antropóloga forense, investigadores, peritos y miembros de la Sección de Inspecciones Oculares y Recolección de Indicios del Organismo; así como la Cruz Roja, la Fuerza Pública y un grupo de voluntarios del Equipo de Rescate Urbano.

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