Proyecto para regular Uber debe ser prioridad tras iniciativa sobre huelgas, dice Alvarado

El presidente Carlos Alvarado apunta al proyecto de ley para regular las plataformas tecnológicas de transporte, tal como Uber, como prioritario una vez sea aprobado en segundo debate la iniciativa sobre las huelgas.

El martes, los taxistas protestaron en el país para presionar al Poder Ejecutivo sobre la situación en que se encuentra la iniciativa. Tras una reunión, el Gobierno se comprometió a discutir con los diputados sobre el tema y buscar acelerar su tramite en la Asamblea Legislativa.

"A un tema que le llegó su hora es el de las plataformas digitales de transporte. Este es el momento para que lleguemos a una regulación", comentó el mandatario este miércoles en atención a la prensa luego de una visita que realizó a la empresa Kimberly-Clark, en Cartago.

Según el presidente, es necesario que existan reglas claras entre todos, eso conlleva una ley que regule en materia tributaria, de aseguramiento, de pago de impuestos, de competencia.

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Los taxistas afirman que la llegada de Uber al país los tiene en "la miseria" y "en quiebra total" y por esa razón el Estado debe compensarlos.

El mandatario confirmó que el Poder Ejecutivo abogará en el plenario para que ese punto sea incluido dentro de la iniciativa, debido a la afectación que ha sufrido este gremio con la llegada de Uber.

"Muchos taxistas han visto merma su actividad y por ello están altamente endeudados, están en una situación muy comprometida", afirmó el presidente.

El proyecto para regular estos servicios fue enviado al plenario por el Ejecutivo a inicios del año, sin embargo fue fuertemente criticado por los diputados de la Comisión de Asuntos Económicos, encargados de darle discusión.

Hasta el procurador general, Julio Jurado, aseguró en marzo pasado a los legisladores que la iniciativa enviada por el Gobierno tenía roces de constitucionalidad.

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Asimismo, Uber se ha manifestado en contra del texto, que establecía que la empresa de transportes deberá pagar impuestos, además de casi ¢8.300 millones para inscribirse; ese dinero, junto al 3 por ciento del monto de cada viaje, se destinará a financiar la modernización de la flotilla de taxis por un periodo de ocho años. Además, la iniciativa faculta a los taxistas a cobrar menos (tras acuerdo con el pasajero), entre otro puntos.