Recope solicita quinto aumento consecutivo en combustibles, súper subirá ¢8 en mayo

La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) solicitó este viernes un nuevo aumento en el precio de las gasolinas, se trata del quinto incremento consecutivo del año, el cual entraría a regir a principios de mayo.

En esta oportunidad se solicita un aumento de ¢8 en cada litro gasolina super, de ¢6 en la regular plus y en el caso del diésel se aplicará una rebaja de ¢19.

El trámite fue presentado ante la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), quien iniciará un proceso de consulta pública y análisis de la propuesta.

"Pese a que el precio internacional de las gasolinas bajó levemente en marzo pasado, el acumulado de aumentos que se vienen dando desde noviembre a marzo llega a un 71% y afecta el precio nacional.

"Los plazos de la metodología de precios que aplica Aresep provoca el llamado rezago tarifario que debe corregirse cada dos meses; ahora corresponde a enero y febrero, cuando se dieron fuertes alzas en el mercado internacional", manifestó Recope por medio de un comunicado de prensa.

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Desde que empezó el año se ha mantenido una tendencia al alza en los precios de los hidrocarburos en el país, incluso, el miércoles anterior entró en vigencia un aumento de ¢57 en la gasolina súper, de ¢55 en la regular plus y de ¢37 en diésel.

Actualmente el precio de las gasolinas es el más altos de los últimos 5 años, por ejemplo, el precio de la gasolina se encuentra en ¢700 por litro y subirá a ¢708 en mayo.

En el caso de la regular plus el litro pasará de ¢683 a ¢689 y el diésel de ¢572 a ¢553.

"Preocupado"

Diversas iniciativas de ley mantienen una discusión pendiente sobre la función de Recope y alternativas para bajar el precio de los hidrocarburos; sin embargo, ninguna tiene una opción real de avance.

Entre las propuestas se pide al Gobierno bajar el precio que se suma a cada litro de combustible por concepto de impuesto único, lo que representa en promedio un 37 por ciento del costo en las gasolinas (entre ¢252 y ¢264) y un 26 por ciento en el diésel (¢149).

Consultado sobre esto, el Presidente de la República, Carlos Alvarado, dijo este viernes que reducir el impuesto no era una opción debido a que eso tendría “impactos en otras partes de la política pública”, y mencionó como ejemplos la inversión en carreteras y en pago de servicios ambientales.

El mandatario dijo que el tema le preocupa y le afecta y que la solución es migrar al uso de otro tipo de energías renovables.

“Obviamente eso a mí me preocupa y me afecta, porque afecta el bolsillo de los costarricenses no sólo cuando tienen que llenar su tanque sino porque afecta toda la cadena productiva, entonces sí es de preocupar, ahí una de las cosas de lo mejor que podemos hacer, como no somos un país productor de petróleo es ser mesurados y ahorrar”, dijo Alvarado al agregar que el país necesita continuar su proceso de descarbonización, aunque reconoció que este cambio es difícil a corto plazo.

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El presidente dijo que al ser un país “altamente dependiente de los combustibles fósiles” no se tiene otra opción inmediata más que ahorrar mientras se logra dejar de depender tanto de este producto.

“La estrategia es lograr una transición de energía cara, contaminante e importada a una energía barata, limpia y nacional. Dando los primeros pasos en esa dirección, el que los precios del petróleo suban o bajen no nos importaría cuando seamos autónomos”, concluyó.

Lo cierto del caso es que mientras las propuestas y proyectos siguen a la espera de ser discutidos a nivel nacional, los consumidores seguirán pagando cada vez más por el precio de los combustibles.